Oct 11, 2006

Grass, una vez más


El escritor alemán Günter Grass ha presentado una demanda por la vía de urgencia contra el diario 'Frankfurter Allgemeine Zeitung' por la publicación de dos antiguas cartas suyas en que aconsejaba a un ministro socialdemócrata revelar su pasado nazi. Se trata del mismo diario que ofreció la entrevista en la que el autor de 'El tambor de hojalata' hablaba de su estancia adolescente en las Waffen-SS.

El diario publicó esas misivas, dirigidas en 1969 y 1970 al por entonces ministro de Economía y Finanzas Karl Schiller, en pleno debate por la confesión tardía de Grass de que en su juventud estuvo en las Waffen-SS.

Grass considera que su publicación vulnera sus derechos de propiedad intelectual, puesto que son personales."/(¿No sería mejor, derecho de intimidad?)

El Premio Nobel de Literatura 1999 ya anunció la semana pasada su propósito de recurrir a los tribunales y expresó su malestar por la dimensión que dio en su día el rotativo a la entrevista en que hablaba de su pasado. Grass considera que el 'Frankfurter Allgemeine' sacó la cuestión de quicio, al anunciar como "confesión" un dato biográfico, del que hablaba en su libro 'Beim Hauten der Zwiebel' ('Pelando la cebolla').

El escritor acusó al diario, arquetipo de la prensa seria alemana, de utilizar métodos sensacionalistas y dijo que consideraba lo sucedido como una violación de su derecho a la privacidad.

Escándalo y debate nacional


El detonante del contencioso entre Grass y el 'Frankfurter Allgemeine' fue la entrevista publicada por el diario, a mediados de agosto, en la que el escritor hablaba de esa parte de su próximo libro. El rotativo lanzó el día antes de la publicación de la larga entrevista un avance editorial, en que anunciaba tal "confesión", lo que desató un gran revuelo mediático.

De la revelación se pasó al escándalo y de ahí al debate nacional sobre por qué el autor, considerado "autoridad moral" del país, había tardado décadas en hablar de eso, cuando llevaba media vida marcando pautas de comportamiento ético.

En medio de la polémica, que aceleró incluso el lanzamiento del libro vista la dimensión de la materia, el 'Frankfurter Allgemeine' publicó esas dos cartas.

En ellas Grass recomendaba a Schiller, ministro de Economía durante la gran coalición presidida por Kurt Kiesinger y durante los gobiernos socialdemócratas de Willy Brandt y Helmut Schmidt, hablar públicamente de su pasado nazi.

Grass, quien ha necesitado varias décadas para hacer su propia confesión, le argumentaba entonces a Schiller que hablar de eso sería una "tormenta purificadora" para Alemania.

El editor del periódico, Frank Schirrmacher, ha salido al paso de esas acusaciones en el semanario 'Der Spiegel' y ha explicado que cada palabra de la entrevista publicada por ese diario con la "confesión" de Grass había sido previamente autorizada por el autor.

"Da igual cómo se sienta ahora Grass. Debe entender de una vez que no fue el 'Frankfurter Allgemeine' quien le forzó a ingresar en las SS, ni fue quien le impulsó a callarlo durante décadas", afirmó Schirrmacher.

"En nuestra entrevista dice que quiere romper su silencio, que quería quitarse este peso de encima. Fue él mismo quien alivió así, dramáticamente, su conciencia", responde el editor en 'Spiegel'./(Nota del editor)

Respecto a la publicación de esas cartas, Schirrmacher argumentaba que éstas eran públicas, en tanto que parte de una tesis doctoral conservada en archivos.

Fuente: El mundo

1 comment:

Anonymous said...

pienso que Grass no escogio el momento ni el lugar para confesar su pasado,creo que debio pensar lo que hacia,!!menos mal que no estamos en la "epoca de la inquisicion",realmente tuvo muy poco tacto y ahora debe afrontar las consecuencias de su impulsibidad.