Sep 20, 2008

¿Quién sino tú?

No me quiero dormir en otros velorios que no se hayan producido antes de conocerte. Debajo de mis manos sudorosas y sucias, apelmazadas de mentiras y horrorosas hipocresías, siento el latido funesto de mi fallecimiento. Siento que muero en un silencio infinito, donde apenas si se escucha el respiro de Dios.

Mis pasos se desvinculan de tu compasión, de tu incomprensión, de tu falta de amor por mis sinceridades.

¿Sinceridades dije? 

Debe ser que algo muy brusco me haya detenido de seguir siendo el fracasado embustero de todas mis aburridas ilusiones.

Debes ser tú. 

¿Quién sino tú, muerte vestida de mujer, 
que me descuartizas y cauterizas 
para otra vez burlarte 
de mis esperanzas
de conseguirme 
un amor cotidianamente bueno?

Y yo esperándote con los brazos abiertos. ¡Qué romántico!

Cada vez más convencido de que me miras con lástimas y con vagas ignorancias de lo que este cuerpo vivo puede hacer por ti, me retiro en paz lejos de tu mundo… 
Mujer muerte, he visto tantos entierros ¿Cuándo harás algo por mi merecida defunción?

Yo por lo menos hice contigo muchas imaginaciones: un mundo contigo y sin mí. Un mundo feliz. 

Sep 12, 2008

HONOR

Podría permanecer despierto sólo para esperar 
a que en cualquier momento me necesites, 
Podría dejar de dormir sólo para ver tu sonrisa 
cuando estás durmiendo
a lo lejos y soñando.

Podría renunciar a todo lo mío, porque tú seas mejor
Permanecería bajo cualquier tormenta 
Con tal que nunca te vuelva a faltar calor.

Podría enrumbarme a las estrellas y contigo
Llevarte de vacaciones al cielo todos los días
Todos los momentos, con todos tus pensamientos.

Podría luchar contra todos tus “monstruos y fantasmas”
Contra mis propios errores
Con tal de que nunca te vuelvan a hacer daño.

Orgullo y honor sería morir ahora y en tu nombre
Morir ahora por defenderte y protegerte.

Deseo servirte un trozo de mi corazón
Deseo demostrarte que no todos somos iguales
Que aunque no soy perfecto,
Puedo seguirte a donde quiera que vayas.

Anhelo luchar por ti, renunciar por ti, soñar por ti…
Oírte desde el amanecer hasta que te duermas
Debajo de mi contemplación perpetua.
Podría invertir mi vida en esta dulce rendición.

Podría permanecer perdido en este momento para siempre
cada momento pasado contigo
Para mí es un tesoro, eres un tesoro.
Lo sabes, nadie más que tú me hace sonreír…

Por eso despierto con el orgullo de saber que existes
Y voy descubriendo que mi vida recién se va iniciando
Que se hace intensa y entregada, Transparente y sacrificada, 
Que se hace verdadera, cuando estamos juntos

No quiero cerrar mis ojos, No quiero quedarme dormido
Porque te echaría de menos, mujer
No quiero mentirte, no quiero ocultarte ni mi sombra
Y no quiero perderme ni un detalle.

Porque incluso cuando sueño contigo
el sueño nunca será más dulce que tu mirada 

Porque incluso cuando tengo miedo de perderte,
te cuento mis horribles pasados que los causé buscándote.
Porque reconozco por vez primera que anduve por caminos absurdos.
Te echaba de menos sin conocerte, te buscaba.

Es un honor para mí, tener que de por vida servirte.

Sep 8, 2008

Navegaciones imperceptibles


Cómo deseo que mediante la transparencia de tu aliento fueras capaz de sorprenderme con palabras distintas a las que escucho de otras mujeres. Pienso que no es un deseo que no se pueda cumplir. Y aunque nuestras naturalezas son distintas y nuestros argumentos heterogéneos, podemos decirnos detalles de cariño sin la sospecha fragmentaria y prismatizada de lo verdadero y lo causante de nuestra dicha por estar juntos y tranquilos. 
Pero también deseo que mediante esta oportunidad que me brindo pudiera ser capaz de decirte que no te quiero; es decir, que no te quiero por un solo instante, sino que te quiero para toda tu vida. Puedo quererte para toda mi vida, pero no creo que yo pueda vivir tanto. Lamento no dejarme comprender.
Es el miedo de quererte para siempre el que me detiene a decirte que te quiero. No sé en realidad cuánto podría sufrir al día sabiendo que tú no serías capaz de aventurarte a tratarme como el hombre de tus muertes, sí, de esas muertes concurrentes que te sacan del cauce de las bendiciones… lamento decirte que te quiero y que quisiera que quisieras quedarte conmigo por igual tiempo del que yo quiero quedarme contigo.
Pero aún así, de que no quisieras estar a mi lado tanto tiempo, sólo quisiera pasar el resto de mi vida mortal a tu lado.
Y decirte por las tardes en que sueñes con tus monstruos, que ahora ya no luchas sola, sino también luchas a mi lado, y también conmigo.
Decirte por las mañanas que cantan los animales más crueles de nuestras entrañas, que te amo aunque quisieras estar despertándote en otros lugares y no conmigo. 
Y amarte, amarte aunque tus cabellos te abandonen y tu belleza sea tan grande que te abandone por causa de tu vejez, y tus parientes te abandonen por causa de tu vejez y tus bendiciones se cansen de tu vejez y Dios te recoja para dormir con él. Amarte, para unirte con un Dios que antes me unió a ti. Algo así… 

Sep 5, 2008

DESDE ANOCHE

Desde anoche, mujer coronada,

has abandonado este mundo idólatra y mal acompañado,

para unirte a mis sueños de nobles amores.


Desde anoche que sentía tu alma respirar

por encima de mis hombros

y tu melancolía huir

por debajo de las llantas

de mis ideas perpetuas.


Desde anoche.


Es desde anoche

que te pude convidar tu primera experiencia de sinceridad

y tú cancelaste por completo

cualquier clima de venganza

contra la inferioridad de las lides y las despedidas.


Me he quedado toda la noche

con los ojos pegados al recuerdo de tu palabra.


Entre planteamientos de problemas y taquillas intrusas por nuestra labor inconsistente, lejos de la lipemanía, estoy yo con la espada al beso y al tacto de tus suspiros, esperando tus caricias, los trazos curvos de tus  labios y ese amor que me brindaste esta última noche enamorada en una lágrima frustrada.

El magancés destino, la mala muerte y los respiros de la ciencia van a intentar golpear las dudas y los reproches, las sospechas y las conductas, y aún así, desde anoche debemos seguir así. Porque lo debemos y nos debemos al amor. 

Ese amor que es desde anoche.